VILLA MERCEDES
Barba en el día de la Virgen de la Merced: “Que el amor vaya construyendo día a día la sociedad y caminemos juntos”
El obispo de San Luis participó de la celebración en honor a la patrona de Villa Mercedes.
Por Sonia Schoenaker
La misa y procesión por el día de Nuestra Señora de la Merced que se celebró esta tarde primaveral en Villa Mercedes, estuvo encabezada por el obispo Gabriel Barba.
Durante la homilía, destacó la frase del Evangelio: “Proclama mi alma la grandeza del Señor y se alegra mi espíritu en Dios mi salvador”.
Reflexionó sobre la vocación de María, quien fue convocada para ser la madre de Jesús, y cómo su “sí” cambió la historia de la humanidad: “Abrió las puertas al misterio de la encarnación, se hizo parte porque Dios la eligió, ella dijo que sí y se involucró”.
Señaló que la historia sigue manifestándose hoy, y que la fe nos tiene que llevar a aprender a escuchar y a discernir, tal como lo hizo la Virgen.
Consideró que los tiempos fueron cambiando, y María es quien nos lleva a comprometernos de muchas formas personales, individuales, sociales, estructurales, “porque Dios nos hizo esencialmente libres y cuando se va perdiendo la libertad, se va perdiendo la dignidad”.
Se refirió a los días anteriores en los que se estuvo desarrollando la novena patronal hasta llegar al día de hoy, y cómo ella sale “al encuentro de sus hijos de distintas maneras”.
En las iconografías, a la Virgen de la Merced se la ve coronada como reina y señora de la creación: “Nos habla de la patria celestial, donde Dios nos espera, donde nos tiene preparado un lugar para cada uno, pero que solamente esa patria celestial se consigue en la medida que vayamos conquistando esta patria terrenal”.
“Que el amor vaya construyendo el día a día, la sociedad de día a día, caminando juntos, sosteniéndonos y levantándonos”, añadió.
En ese sentido, Barba invitó a los fieles a renovar su fe “según sus tiempos y sus necesidades”, y decir “sí” al camino de la santidad. Sostuvo que María nos llama a ser constructores de libertad y dignidad.
“Tenemos certeza de que somos pecadores, tenemos certeza de nuestros errores, pero tenemos que tener la misma certeza de la misericordia que Dios nos tiene siempre. Y justamente para eso nos lleva de la mano, para proclamar junto a ella las grandezas del Señor”, dijo.
Estuvieron presentes el intendente de Villa Mercedes, Maximiliano Frontera; la viceintendenta, Silvina Galetto; el senador Adolfo Castro Luna; los concejales Cecilia Lucero, Miguel Ángel Arce, Karina Maranguello, Lucía Lacerda y Claudia Miranda; y funcionarios municipales.
También participaron de la actividad la agrupación gaucha El Corcovo, las escuelas católicas de la ciudad, la Asociación de Veteranos “Fundación Malvinas en un abrazo”, Defensa Civil, Policía de la Provincia, Policía Federal Argentina y la Banda Militar de la V Brigada Aérea “Teniente Manuel Félix Origone”.
Luego de la misa, se realizó una procesión que partió desde la parroquia, sobre calle Pedernera, dobló por Tucumán para retomar en Lavalle y culminar de nuevo en el punto de partida caminando por León Guillet.
Al final del recorrido, el sacerdote chileno José Antonio Atucha Abad, quien estuvo presente durante la fiesta patronal, fue declarado “Visitante ilustre” por parte de la Municipalidad.
También monseñor Nemesio "Nolo" Benítez recibió un reconocimiento por los 40 años que lleva realizando tareas pastorales a lo largo de la provincia de San Luis.
“Se que Villa Mercedes es una ciudad que ama a su madre, es porque lleva su nombre. En estas fiestas otra vez nosotros, su pueblo, le volvemos a decir “sí” a la Madre para que nos siga protegiendo cada día de la vida, no solamente en este día de fiesta, sino cada día del año, que nuestra Madre nos pone bajo su amparo, bajo su manto”, concluyó monseñor Barba para darle cierre a la celebración.